
Como todos los 28 de mayo celebramos a quienes dirigen y actúan en las áreas pertinentes del Poder Ejecutivo, la Legislatura Provincial y el Poder Judicial de los gobiernos Municipales y entidades privadas.
También a quienes cumplen esa delicada función en las distintas reparticiones y organismos públicos y privados que incluyen la intervención de esos recursos humanos valiosos en sus organigramas de funciones.
Esta fecha tiene relación con la sanción de las primeras normas protocolares destinadas a la organización de Actos Públicos en la época de la Revolución de Mayo.
Esa norma se denominó “Institución para el Despacho y Ceremonial” y fue redactada por el Dr. Mariano Moreno para la Primera Junta de Gobierno el 28 de mayo de 1810.
El Ceremonial asesora, sugiere. El mundo gira sobre las ruedas del Ceremonial, tiene que ver con la palabra comportamiento, es conducta, con principios de moral, aporta una convivencia excepcional, no le debe importar el color político.
Lo importante es-según lo consignan los entendidos en el tema- tratar a las personas con cortesía, aplica el orden de precedencia y de jerarquía de los funcionarios públicos, las reglas del ceremonial hacen exclusión de la religión y color.
A modo de síntesis, se coincide en que el ceremonial es la técnica del arte de la vida social, que nació en el mundo por una necesidad social, para el entendimiento de las personas y de las naciones respetando los códigos de usos y costumbres de los pueblos.
Cumplir con las normas del Ceremonial implica cuidar el detalle en las relaciones humanas y tener presente que la cortesía implica necesariamente el respeto por las jerarquías.
El Ceremonial y el Protocolo, incluyendo las buenas maneras, el buen vestir, la etiqueta, la cortesía y la precedencia, entre otras normas, mejoran las relaciones interpersonales hacia el interior y exterior de las Organizaciones y potencia los mejores resultados.